La hija de antonio fue notificada por los vecinos de la colonia Guadalupe Proletaria, en la alcaldía Gustavo A. Madero. Que su padre había sido atropellado por un tráiler durante su jornada como vendedor ambulante.
El hombre de 81 años salió como cada día a ofrecerles agua a los conductores que pasaban por el Eje Central Lázaro Cárdenas, en su cruce con la Calle 14, cuando, aparentemente, el conductor de un tráiler se pasó la luz roja del semáforo donde trabajaba Antonio, arrollándolo. Las llantas de la pesada unidad le pasaron por encima de la cabeza y el torso, causando su muerte al instante.
Aunque según otros testigos, el trailero intentó frenar, debido a la velocidad y el peso de la unidad, hicieron que fuera imposible que pudiera detenerse a tiempo.
Luego del accidente, el cuerpo de Antonio quedó boca abajo, a mitad de la caja del tráiler, conmocionando a transeúntes, vecinos y compañeros de trabajo, quienes lo reconocían por el esfuerzo y dedicación que le tenía a su trabajo.
Sin terminar de creer lo que había pasado, los testigos llamaron a los servicios de emergencia. Lamentablemente, los paramédicos solo pudieron confirmar el fallecimiento del hombre, indicando que presentaba un traumatismo craneoencefálico severo, además de múltiples lesiones internas.
De forma protocolaria, los elementos de la SSC acordonaron la zona, mientras el conductor era detenido tras intentar darse a la fuga luego de darse cuenta de lo ocurrido, pero un automóvil que esperaba su luz verde logró impedir su fuga.
La hija de Antonio pidió a la policía que se le realizara un examen toxicológico al trailero para verificar que no manejaba bajo los influjos de alcohol o alguna droga.
Frente a la mirada de decenas de mirones, los peritos de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México realizaron las diligencias correspondientes y realizaron el levantamiento del cuerpo.